Pago por uso: el concepto de propiedad se difumina
Los ingresos anuales de las firmas que han implementado modelos de pago por uso crecieron un 435% desde 2012, según el último ”Índice de la economía de la suscripción” de la plataforma de software Zuora.
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El pago por uso es un modelo de pago en el que el cliente paga por usar el producto el tiempo que necesite en lugar de tener que comprarlo. En otras palabras, cuanto más usa el cliente el producto, más paga y viceversa.
Según el modelo de pago por uso, la propiedad y responsabilidad del producto recae en la propia empresa, y el cliente paga una tarifa por el uso según demanda. Muchos clientes prefieren este modelo porque les gusta la idea de pagar sólo por los servicios que requieren y utilizan. En muchos casos, también terminan recibiendo un mejor servicio porque el fabricante tiene un mayor interés en ofrecer un producto duradero.
El pago por uso no es algo nuevo. Las empresas de servicios públicos lo han estado utilizando durante años porque les permitía realizar un seguimiento del uso. Ahora, con el auge del IoT (Internet de las Cosas), el seguimiento del uso de los productos se ha vuelto más fácil, más accesible y más preciso que nunca. Este nuevo flujo de datos ha hecho que el pago por uso sea una opción más viable para negocios que antes no tenían las capacidades tecnológicas para obtener valor de él.
Un buen ejemplo de una empresa que está implementando con éxito el pago por uso es Homie en los Países Bajos, esta empresa oferta a los usuarios solicitar una lavadora, secadora o lavavajillas online, instalarlos de forma gratuita y pagar solo por el uso de cada electrodoméstico (con un mínimo mensual bajo).
Los clientes pueden elegir entre contratos “ligeros” o “pesados” según sus hábitos de lavado y cambiar entre ambos dos veces al año. La tarifa mensual mínima cubre cualquier costo adicional como mantenimiento y reparación.
El objetivo de Homie es proporcionar una solución asequible de pago por uso para lavadoras y secadoras. Además al proporcionar a sus clientes información sobre su uso, quieren estimular un lavado más eficiente desde el punto de vista energético.
Los beneficios para las empresas son claros:
- Evolución del producto: las empresas ven facilitado el seguimiento del uso, dándoles una mejor idea de cómo los clientes interactúan con su producto. Saber lo que les gusta y no les gusta a los clientes facilita que las empresas mejoren, creen opciones personalizadas e incluso creen nuevas ofertas.
- Mayor cuota de mercado: el pago por uso reduce la barrera de entrada para muchos segmentos de clientes al minimizar unos costos de entrada que podrían desanimar a los clientes.
- Fidelización del cliente: La relación empresa-cliente se centra más en el servicio en lugar de una interacción de compra única. Esto hace que sea menos probable que los usuarios cambien a la competencia. Además, el valor del producto aumenta con ventajas adicionales como instalación, mantenimiento y soporte que crean más valor para el cliente.
Por su parte los clientes también se benefician de:
- Menos responsabilidades: este modelo transfiere los riesgos de propiedad y la responsabilidad de mantener el producto a la propia empresa como parte de la oferta.
- Reducción de costos: ya que solo pagan por los productos y servicios que utilizan. Esto significa que no tienen que invertir grandes sumas de dinero por adelantado para acceder a productos o servicios que no necesitan, el costo mensual es flexible y fácil de monitorear al estar basado en el uso real.
- Productos y servicios constantemente mejorados: para que este modelo sea plenamente viable, las empresas confían en la fidelidad de sus clientes. Esto significa que mejoran constantemente sus productos y servicios en función de los datos de los clientes.
- Flexibilidad: permite a los clientes pagar solo por lo que utilizan, lo que les da más libertad para adaptar su consumo a sus necesidades específicas. Esto significa que los clientes pueden ajustar su gasto en función de sus requerimientos cambiantes, lo que puede mejorar la eficiencia.
- Accesibilidad: para una gama más amplia de clientes, especialmente aquellos que no pueden permitirse pagar grandes cantidades de antemano. Esto puede ser particularmente útil para empresas emergentes y pequeñas que buscan mantener bajos los costos iniciales.
- Sostenibilidad: al crear un modelo económico más responsable con el medio ambiente, a través de la reducción de los recursos utilizados, que ayuda a disminuir la huella de carbono y al promover la reutilización y el reciclaje de los productos.
En España, la facturación ascendió a 3.170 millones de euros en 2021, un 28% más que el año anterior, y se estima que en 2022 debió aumentar entre un 20 y un 30%.
Si quieres ampliar esta información y conocer cuáles son los sectores con mayor probabilidad de implantación de este modelo, consulta la versión completa del artículo en el último Informe de Tendencias en Comercio elaborados por Enfokamer, Observatorio del Comercio de Euskadi, entidad perteneciente al Departamento de Turismo, Comercio y Consumo del Gobierno Vasco.
