¿Cuánto cuesta poner en marcha un negocio en Euskadi?

Poner en marcha un negocio en Euskadi cuesta de media 24.500 euros, según los últimos datos presentados por el Observatorio Vasco del Emprendimiento en su Informe GEM 2023. Este informe, que recoge el análisis del ecosistema emprendedor del País Vasco, subraya que la tasa de emprendimiento en la región se mantiene estable en el 5,5%, en línea con los datos de 2022.

La inversión inicial requerida para empezar un negocio varía considerablemente, y aunque la media se sitúa en los 24.500 euros, el informe revela diferencias significativas en las necesidades de financiación. Un 20% de los emprendedores superó los 150.000 euros en inversión, una cifra que marca un récord histórico, mientras que el 21,5% comenzó su proyecto con menos de 10.000 euros. Estos datos subrayan la diversidad de enfoques y recursos que requiere el tejido empresarial vasco, dependiendo del sector y el tamaño de los proyectos.

El perfil del emprendedor vasco y sus fuentes de financiación

El emprendedor vasco tiene una edad media de 44 años, algo superior a la registrada en años anteriores, y más de la mitad de quienes dieron el paso de crear su propio negocio en 2023 cuentan con estudios universitarios. Este dato sugiere que el emprendimiento en Euskadi está siendo impulsado por personas con un nivel educativo alto, lo que podría explicar el interés por proyectos más especializados, como los servicios intensivos en conocimiento, que representan el 20% del total.

Una de las conclusiones destacadas del informe es que la financiación de los proyectos sigue siendo, en gran medida, de origen personal. Ocho de cada diez emprendedores utilizan sus propios ahorros para financiar su negocio, lo que subraya la importancia de la planificación financiera previa para quienes buscan crear su propia empresa. Además, el 23% recurre al apoyo de familiares y amigos, y un 31% opta por acudir a entidades financieras para obtener el capital necesario.

Otras formas de financiación, como las ayudas y subvenciones públicas o la inversión informal, también juegan un papel relevante, aunque en menor medida. El Informe GEM 2023 destaca que el 5,6% de los emprendedores ha recurrido a la inversión informal, una cifra que se encuentra en máximos históricos, reflejando un creciente interés en fuentes alternativas de financiación.

Las motivaciones para emprender y los sectores predominantes

En cuanto a las razones para emprender, más de la mitad de los nuevos emprendedores (54%) indicaron que la creación de un negocio es la principal vía para ganarse la vida, aunque este motivo ha disminuido significativamente respecto al año anterior, cuando lo señalaba el 69%. Por otro lado, la creación de riqueza o el acceso a rentas más altas ha ganado protagonismo como motivación, alcanzando el 37,5%, mientras que la continuidad de la tradición familiar motivó al 20% de los nuevos empresarios.

El informe también resalta que la mayor parte de los negocios creados en Euskadi en 2023 pertenecen al ámbito de los servicios tradicionales, mientras que solo un 6% corresponde al sector industrial. Esto refleja una tendencia hacia sectores menos intensivos en capital y más orientados al comercio, la hostelería y otros servicios. Sin embargo, la especialización en servicios intensivos en conocimiento ha ido ganando terreno, representando un 20% de los nuevos negocios.

El emprendimiento femenino y la aportación al empleo

Un aspecto especialmente positivo que destaca el informe es la desaparición de la brecha de género en el emprendimiento. En 2023, el número de mujeres que emprendieron fue igual al de hombres, una evolución que pone de manifiesto la creciente participación femenina en el ecosistema emprendedor vasco.

Otro dato alentador es que el emprendimiento en Euskadi está contribuyendo de manera significativa al mercado laboral. El 34% de las nuevas empresas creadas en 2023 cuentan con al menos un empleado, y de estas, siete de cada diez ofrecen contratos indefinidos a tiempo completo. Además, la mitad de los nuevos negocios planea formalizar contratos adicionales en los próximos cinco años, lo que refleja la solidez de los proyectos y su capacidad para generar empleo estable.

Previsiones de futuro: un ecosistema sólido

A pesar de los desafíos que enfrentan los emprendedores en Euskadi, el Observatorio Vasco del Emprendimiento señala que las previsiones de futuro son sólidas. El 7% de la población vasca manifiesta su intención de emprender en los próximos tres años, lo que sugiere un panorama prometedor para el emprendimiento en la región.

No obstante, persisten barreras importantes. El informe destaca que, aunque casi la mitad de la población vasca declara tener las habilidades necesarias para emprender, solo el 5,5% da el paso definitivo, con el miedo al fracaso como una de las principales razones para no emprender, especialmente entre las mujeres.